¿POR QUE  NO BAJAN LAS TASAS DE INTERÉS?

 

 

Por Miguel A. Martín Mato

 

A partir que la tasa de referencia del Banco Central de Reserva (BCR) ha bajado de 6.5% a 1.25%, se viene discutiendo sobre como esta fuerte baja no ha tenido el efecto o repercusión que desea. Es cierto que cual quier libro de economía dice que estas políticas no tienen un impacto inmediato, pero es muy importante  analizar las imperfecciones del sistema financiero peruano.

 

En enero de este año, las letras del tesoro de EE.UU. daban una rentabilidad de 3.11% y las cuentas de ahorros en dicho país otorgaban una tasa de 4.25%. Dos meses después, la Reserva Federal redujo la tasa de referencia y las letras del tesoro daban una rentabilidad de 1.33% y las cuentas de ahorros daban un 3%.

 

Lo señalado demuestra como en los países desarrollados la transferencia de las tasas en la política monetaria tiene cierta rapidez, pero analicemos las siguientes imperfecciones que hay en el Perú:

 

Imposibilidad de comprar el activo libre de riesgo.

En el país, solo las instituciones financieras pueden comprar certificados de depósitos (CD) del BCRP, a diferencia de otros países como Estados Unidos o Europa cuyo activo libre de riesgo (por ejemplo, letras del Tesoro) puede ser comprando por personas y empresas, anunciándose incluso en televisión. Eso hace que si las tasas del gobierno suben o bajen automáticamente se transfieren a la economía.

 

Fuerte concentración bancaria.

Tenemos la concentración bancaria más alta de toda Latinoamérica, en la que solo tres bancos poseen casi el 80% de todos los depósitos del sistema.

 

 

 

Estructura de la concentración bancaria.

La suma de los depósitos que poseen esos tres bancos es de 70,000 millones de soles, pero lo interesante es que la mayor proporción de ese dinero es de corto plazo. Aproximadamente, el 50% es de cuentas a la vista y cuentas a la vista y cuentas de ahorro.

 

Tasas de fondeo.

Las tasas interés a las que se fondean dichos bancos por ser cuentas corrientes de las empresas y las cuentas planillas de los trabajadores (obligados por su empleador a estar en esos bancos), hacen que su tasa de costo esté entre 0% y 1%.

 

Esto implica que la política monetaria en cuanto a tasa de interés no tiene ningún efecto en los productos de pasivo (depósitos), y por tanto en los de activo (créditos).

 

Para comprobarlo con un ejemplo; en enero, la tasa de referencia estaba en 6.5% y los CD del BCR daban también  un rendimiento parecido. Sin embargo, las cuentas de ahorros de los grandes bancos no daban más que 1%, siendo por tanto esta su principal tasa de fondeo.

 

Además, la fijación de una tasa alta, hace a los bancos hacer sencillas operaciones de arbitraje, es decir, ese dinero de los depósitos por cuentas corrientes y de ahorro por el cual pagaban una ridícula tasa (de 0% a 1%) pudiera ser invertido en CD del BCRP mas de 6% a plazos inferiores a 1 semana, operación que además es exenta de encaje. Esa si es una forma bonita de ganar 5% de margen en operaciones libres de riesgo, por tanto, cualquier operación crediticia tiene que dar muchísimo mas margen.

 

Es prioritario poner en marcha medidas que fomenten la desconcentración de depósitos (por ejemplo, derechos a elegir banco de los empleados) unidas a medidas que fomenten la competencia (entrada de nuevos bancos).  

 

 

Fuente: Diario Gestión (19/08/09)