CONSEJOS PARA SER UN CONSUMIDOR RESPONSABLE
 

 

 

Por  Nicolás Bardella

 

 
Como consecuencia del paradigma de una sociedad capitalista, de máximo consumo posible, nos vemos obligados a trabajar para que nuestras actividades se desarrollen dentro de los límites que admiten los recursos naturales. Teniendo en cuenta esto, hay que considerar que la expansión económica permitió importantes avances en el desarrollo del hombre, pero ocasionó graves daños al ambiente.

Ahora bien, muchas veces olvidamos que los grandes problemas ambientales tienen relación directa con nuestros comportamientos individuales y que cambiando nuestras pautas de consumo podemos disminuir la dimensión de la crisis ambiental, reduciendo y buscando alternativas a la hora de adquirir bienes y servicios.

En esto consiste el consumo sostenible, en el uso de servicios y productos que cubran las necesidades básicas y aporten una mejor calidad de vida, y que al mismo tiempo permitan reducir la explotación de recursos naturales, la utilización de materiales tóxicos, la generación de desechos y la emisión de contaminantes en todo el ciclo de vida del servicio o producto.

Los puntos que se enuncian mas abajo, son acciones que pueden llevarse a cabo desde el seno de un hogar. Están orientados a un mejor aprovechamiento de los consumos que realizamos y a un cuidado ambiental, que por más que no parezca, comienza con la elección de los mismos, por ejemplo, en la góndola de los supermercados:

1. Al hacer las compras, utilizar bolsas de tela o el changuito; rechazar las bolsas de plástico.

2. Tratar de no usar productos descartables; comprar productos que duren más y puedan ser reutilizados.

3. Atender al etiquetado y elegir los productos envasados con material reciclado o reciclable y aquellos identificados como biodegradables.

4. Comprar productos en envases retornables; evitar los envases de plástico.

5. Botellas y otros productos de vidrio: reutilización luego de lavados o nuevas botellas mediante el reciclaje.

6. Optar por productos en tamaño familiar, ya que generan menos residuos por unidad.

7. Evitar el consumo innecesario de papel y cartón, y reutilizarlos para otros usos.

8. Solicitar que no se envuelvan los objetos comprados, a menos que sea indispensable.

9. Dejar en los negocios los envoltorios innecesarios.

10. Evitar comprar alimentos en “bandejitas” de poliestireno.

11. Usar pañuelos, servilletas de tela o filtros de café reutilizables en vez de los de papel.

12. Donar muebles, artefactos, ropa, juguetes, libros, etc.; no descartarlos en la vía pública.

13. Elegir accesorios personales y aparatos para el hogar que tengan larga duración y puedan ser reparados en caso de deterioro.

14. Si se dispone de un patio, intentar “compostar” (utilizarla como abono) la basura orgánica (restos de comida, yerba, té, café, cáscara de fruta).

15. Restos de alimentos: como abono orgánico y lumbricultura.

16. Restos de poda y de jardinería: como abono.

17. Imprimir sólo aquello que sea estrictamente necesario, y utilizar las hojas en doble faz.

18. Utilizar cartuchos de tinta recargables.

19. Reducir el uso de papel de aluminio y de envases tetra-brick.

20. Utilizar pilas recargables.

21. Elegir lámparas de bajo consumo.

22. Separar el papel, aluminio, plástico, vidrio, materia orgánica, etc. para ser reutilizados o reciclados en forma casera o a través de circuitos externos.

23. Emplear los papeles de imposible o difícil reciclaje (plastificados, encerados, de fax, etc.) sólo cuando no exista otra alternativa.

24. Escombros: para relleno de terrenos, de caminos y para la construcción en general.

25. Muebles y electrodomésticos rotos: para repararlos o recuperar los materiales.

Para terminar, quiero dejar un claro una idea: los puntos planteados, nos hacen acercarnos un poco mas a ser consumidores “responsables”, pero las acciones que cada uno lleva adelante, no tendrán mucha incidencia si no son seguidas por un Plan de Gestión Integral de Residuos por parte de las autoridades, donde se incluya una estrategia de Educación Ambiental y un manejo responsable de los mismos.

 


Fuente:
ecoportal.net