Redes para incluir

 

La tecnología avanza a una velocidad cada vez mayor. Siguiendo las predicciones de Gordon Moore, el cofundador de la firma Intel, la complejidad de los circuitos integrados se duplica a un ritmo casi anual; esto, en sencillo, significa que casi cada 12 meses se duplica la capacidad de almacenamiento, la velocidad de los microprocesadores, de pixeles, etc.

 

Juan José Garrido
director@peru21.com

 

Para las economías desarrolladas esto presenta tanto ventajas como problemas; por un lado se benefician por la vía de la innovación y el desarrollo tecnológico. Por el otro lado, genera cada vez mayores desigualdades entre quienes participan de esta revolución tecnológica y aquellos que optan por empleos tradicionales.

¿Cómo afecta esta vorágine tecnológica a los países emergentes como Perú? En principio, nos aleja cada vez más de la frontera tecnológica. No es sólo un tema de acceso a las tecnologías; se trata de empleos, calidad de vida, acceso a servicios, y un largo etcétera.

¿Qué nos queda por hacer en dicho escenario? Patrick Aebischer, presidente de la Escuela Politécnica Federal de Lausana, lo concretó en un solo esfuerzo: mejorar la infraestructura de internet; esto es, apostar por la banda ancha. El problema es que, como en la infraestructura física (carreteras, trenes, puertos y aeropuertos, entre otras), nuestro atraso es cada vez mayor.

Según un estudio publicado por El Comercio, el día de hoy sólo el 5,5% de la población posee internet alámbrico, y con velocidades de descarga extremadamente bajas, incluso comparándonos con otros países de la región.

Si revisamos el mapa del Perú, la banda ancha es un fenómeno costero (salvo una red que ingresa hasta Huancayo y otra hasta Puno). La conectividad, además, sabemos que ha servido en gran medida para reducir las brechas económicas y sociales entre las áreas rurales y urbanas a lo largo y ancho del país.

Deberíamos pues hacer una apuesta por mejorar, en el corto plazo, esta desigualdad, que no sólo limita la conectividad interpersonal sino también el acceso a servicios de todo tipo. Sería el mayor salto de inclusión en términos reales.

 

Publicado en Peru21 el 7 de enero del 2014