Alejados de la Realidad

Autor: Paul Krugman

Premio Nobel de Economía 2008

Estamos viendo una subcultura política en Estados Unidos cuyos principios no pueden ser cuestionados, ni siquiera si la evidencia dice lo contrario

Muchos de los que estamos en el asunto del análisis económico nos preguntábamos cómo responderían los nuevos líderes del Congreso al fuerte empuje del crecimiento del PBI en Estados Unidos que, ahora sabemos, comenzó en la primavera (boreal).

Tras años de insistir que el presidente Barack Obama era el responsable de la débil economía, no podían decir la verdad - que el desempeño decorto plazo tiene muy poco que ver con quién ocupa la Casa Blanca -, pero no me imaginé que se atribuyesen el crédito.

No importa que toda la data positiva provenga de un periodo previo a las elecciones de medio término (realizadas en noviemvbre). El nuevo líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, dice que él lo hizom que el crecimiento refleja " las expectativas por un nuevo Congreso (dominado por el Partido Republicano)".

La respuesta del comité Nacional del Partido Demócrata - "ja, ja ,ja"- parece adecuada. Es que estoy hablando de la teoría económica vudú: McConnell no solo está proclamando que puede creae prosperidad sin haber aprobado ninguna legislación, sino que puede volver al pasado y crear prosperidad antes de asumir el poder.

El autoengrandecimiento de McConnell es gracioso, pero también asusta porque es un síntoma del estilo de conclusión epistémica de su partido. Lo que sucede es que los republicanos saben muchas cosas que no son ciertas y ninguna evidencia contraria, por más grande que sea, hará que cambien de opinión. Al menos en senador no hizo lo que muchos de sus correligionarios han hecho cuando se enfrentan a la incómoda realidad: recurrir a las teorías de la conspiración.

Por ejemplo, recodemos cómo algunos republicanos trataron las buenas noticias sobre la reforma de la salud. Antes de la entrada en vigencia de Obamacare, insistieron en que serían un desastre y que más gente perdería su seguro de la que obtendría uno.

Por supuesto que estuvieron encantados con los problemas técnicos iniciales en el sitio en Internet del programa, pero esos inconvenientes fueron reparados y las afiliaciones se dispararon.

¿Cuál fue su respuesta? "Están maquillando las estadísticas", declaró el senador John Barrasso, quien ahora encabeza el Comité de Política Gubernamental del Senado. Pero eso feu entonces, y ahora existen múltiples confirmaciones independientes - la más reciente de Gallup- de que Obamacare ha expandido dramáticamente las cobertura del seguro de salud.

¿Y ahora qué dicen? La Legislación "colapsará bajo su propio peso", sostiene el congresista Paul Ryan, nuevo presidente del Comité de Medios Arbitrarios de la Cámara de Representantes. Por cierto, han pasado casi cuatro años desde que él y muchos otros en su partido fustigaron a Ben Bernanke, entonces presidente de la Reserva Federal (Fed), por las políticas que según ellos generarían una elevada inflación y "degradarían" al dólar.

La inflación no aumentó y el dólar se fortaleció, pero Ryan no dio señales de haber aprendido la lección - y muchos conservadores, incluyendo intelectuales como Niall Ferguson de Harvard, ahora insisten que el Gobierno está ocultando el incremento de los precios-.

Ah, y Europa - cuyo banco central, a diferencia de la Fed de Bernanke, asumió esas advertencias inflacionarias el 2011- ahora experimenta una deflación con implicancias terribles para sus perspectivas económicas y políticas.

Y también está el cambio climático. Parece ser que el 2014 fue el año más caluroso, lo cual debería cerrarle la puerta a los tontos clamores de que el calentamiento global se ha detenido. Pero eso no le importará al senador James Inhofe, quien ahora preside un comité medioambiental crucial y que por largo tiempo ha insistido en que toda la ciencia en este campo es una farsa.

Pero todos hacen predicciones que resultan ser equivocadas, qué mundo tan complicado. Nadie es perfecto, pues. El punto, sin embargo, es que el Congreso ahora está controlado por hombres que nunca admiten errores, mucho menos los propios.

En ciertos casos, pueda que no sepan que están equivocados. Después de todo, los medios de información conservadores no son conocidos por su cobertura equilibrada. Si la imagen que usted tiene de cómo está funcionando la reforma de la salud está basada en Fox News, probablemente tiene una sensación de que ha sido un enorme desastre, pese a que ha sido un éxito que ha sorprendido hasta a quienes respaldan la ley.

Sin embargo, el punto principal es que estamos ante una subcultura política cuyos principios ideológicos no pueden ser cuestionados de ninguna manera. Así, la teoría económica de la oferta es válida sin importar qué le está ocurriendo a la economía real, el seguro de salud tiene que ser un fracaso pese a que está funcionando, y cualquiera que subraye las verdades incómodas es un enemigo.

Y no estabamos hablando de figuras marginales. En ocasiones oímos que el Partido Republicano de antaño está de regreso, que los extremistas del Tea Party están a la cooperación bipartidista.

Pero eso en una fantasía, pues no se puede tener una cooperación significativa cuando es imposible ponerse de acuerdo sobre la realidad, cuando hasta las figuras republicanas porminentes creen que los hechos, tal como están ocurriendo, tienen un sesgo de liberal.

Publicado en: Diario Gestión ( 14 de Enero del 2015 )