Fitch: Economías de América Latina divergen en medio de riesgos políticos e inflacionarios

Fitch considera que el balance de riesgos en la región sigue sesgado a la baja.

El crecimiento en Colombia, Perú, Chile, Ecuador y Brasil continuará contenido por la dependencia de los precios de los productos básicos y la desaceleración de la demanda mundial, afirma Fitch.


-Las diferencias macroeconómicas entre los países de América Latina son cada vez más pronunciadas a medida que la constante desaceleración y los mayores riesgos políticos, inflacionarios y de alza de tasas de interés están causando estragos, según Fitch Ratings.

Si bien Fitch considera que el balance de riesgos en la región sigue sesgado a la baja, los lazos económicos con Estados Unidos están estabilizando algunos países, entre ellos México, América Central y el Caribe. Sin embargo, el crecimiento en Colombia, Perú, Chile, Ecuador y Brasil continuará contenido por la dependencia de los precios de los productos básicos y la desaceleración de la demanda mundial.

Mientras la mayor economía de la región enfrenta una profunda y prolongada recesión, el PBI promedio de América Latina se contraerá un 0.6% en el 2015 y crecerá un 0.6% el próximo año y 2.1% en el 2017. La desaceleración ha afectado a los ingresos del gobierno y empresas, y también ha comenzado a impactar el mercado laboral de la región.

Una menor creación de empleos, aumento del desempleo y salarios reales estancados son todas causas de preocupación –en particular para una región donde el consumo proveniente de una creciente clase media ha sido un factor de crecimiento importante en los últimos años. Una mayor deuda, inflación y el aumento de las tasas de interés representan riesgos adicionales para el desempeño de los consumidores en el corto plazo.

“La caída del crecimiento y las monedas, y las presiones inflacionarias han añadido complejidad a los desafíos macroeconómicos de la región –poniendo a algunos bancos centrales entre la espada y la pared en materia de políticas”, comenta Rui Pereira, director gerente y funcionario de crédito regional de Fitch.

“En tanto las caídas de las monedas han llevado a la inflación por encima de los niveles meta en varios países, los responsables políticos de la región podrían enfrentar efectos secundarios desagradables: elevar las tasas para frenar la inflación, pero potencialmente comprometer un crecimiento que ya es débil”.

Además, el aumento de los costos de financiamiento y el acceso limitado a los mercados de capital empujaron a un número de emisores hacia las financiaciones bancarias privadas y los mercados de capital locales.

Si bien el riesgo de refinanciamiento ha sido en su mayoría contenido hasta ahora, se espera que las necesidades de financiación aumenten en los próximos 24 meses mientras las corporaciones de la región enfrentan US$ 14,200 millones en vencimientos en el 2016 y US$ 27,600 millones en el 2017.

En toda la región, las rebajas han superado las mejoras en una proporción de 3:1 en el periodo de doce meses hasta finales de octubre, con Brasil representando más del 75% de acciones negativas. A pesar de la tendencia de calificaciones negativas, casi el 25% de las calificaciones de Fitch Issuer Default siguen teniendo una perspectiva de calificación negativa.

 

 

Fuente: Diario Gestión ( 19 de Noviembre del 2015)