CHACÁN: PESCA, VIVENCIAS Y RELATOS EN LA LAGUNA HUAYPO

 

 

Déjate llevar por la tranquilidad de las aguas del lago Huaypo, en Anta, donde el sosiego de sus paisajes andinos te serán más que sorprendentes.


Cuentan las mujeres de la comunidad campesina de Chacán que cerca del pueblo hay una roca con forma de mujer cargando a un niño en sus brazos. Se trata de una ñusta, en español significa doncella, que quedó petrificada como castigo tras desobedecer a un ser divino. La imagen parece mirar hacia la laguna de Huaypo, como queriendo mostrar algo a alguien. ¿Qué nos querrá decir su mirada?

Pues hace muchísimos años –refresca la memoria Leucadia Justiniana– el lago era una ciudad donde vivía gente adinerada. Una vez, los habitantes celebraban una boda excesivamente rica. Había de todo. De pronto, un anciano que deambulaba por allí, se acercó a la ceremonia mendigando comida. Le negaron más de una vez. Menos la cocinera que se apiadó él. En castigo, el longevo lanzó su ira sobre aquel pueblo y en agradecimiento, dejó que la generosa mujer escapara con su pequeño.

 


La historia no termino bien para la amable cocinera quien no pudo contener su curiosidad. Al voltear se convirtió en un dos por tres en piedra. Y así quedó la ñusta encantada, cuya mirada se pierde en la laguna Huaypo que alguna vez fue poblada.

Tal vez esta sea solo una leyenda, pero bautizó a una asociación integrada por mujeres empoderadas que sueñan que la comunidad de Chacán sea uno de los principales destinos para el turismo rural comunitario. Así lo desea Leucadia, presidenta de la asociación Ñusta Encantada.

Pesca en la altura

Pero como les seguía diciendo, más que leyendas populares estas historias se tejen junto a otros atractivos que se promocionan en el distrito de Anta, provincia del mismo nombre, en Cusco. El más concurrido es ese gran lago de aguas cristalinas es tan notoria que incluso podemos ver como las truchas y los pejerreyes se sumergen del bote. ¿Peces en la altura? ¡Pues claro! Sí vas a visitar Chacán, tienes que ir a pescar con los pobladores de la zona.

 


Lo mejor de todo es que la agencia de viajes CBC Tupay nos ahorra el tiempo que se pierde en planificar dicha actividad. Dentro de sus paquetes turísticos incluyo pasar una estadía placentera en las casas de las compañeras de la Ñusta Encantada y compartir los quehaceres de la vida del campo, entre ellos ir de pesca.

Si bien el lago se encuentra a 20 minutos del pueblo, es preciso para aprovechar la distancia y estirar las piernas a más de 3.000 m.s.n.m. Con este primer calentamiento, estarás más que listo para los siguientes retos.

Al llegar a este gran espejo de agua, aprovecha el día para recorrer su esparcimiento que está acondicionado como los centros campestres, listo para que las familias disfruten de las zonas de picnic o acampen a orillas del majestuoso Huaypo.

Pero ahí no queda todo. Recuerda que debes abordar los botes estacionados en la orilla. Una vez a bordo, Avelino, guía local, u otro compañero será el encargado de explicarte el procedimiento de la pesca artesanal. Y es que sobre estas aguas, además de practicar kayak, los viajeros también hacen de cazadores e intentar cazar su propio almuerzo.

 

 

Así tranquilo porque para atrapar a una gordita trucha o más de un pejerrey, deberás concentrarte y lanzar la carnada lo más lejos posible. Solo aprende de los patos salvajes como cazan sin tanto esfuerzo. Ah, eso sí. No te desanimes si más de un pececito se roba tu carnada. Tiempo al tiempo y cuando menos lo espe… ¿qué pasó? ¿Ya agarró la carnada? ¡Vez! Te lo dijimos.

Ahora aprovecha la tranquilidad de las aguas del lago Huaypo, mira al firmamento limpio y dale un profundo respiro. ¿Lo sientes? Es esa desconexión total que te libera de la agitada vida laboral o tensiones del estudio. Aquí en Chacán encontrarás un solo tipo de wifi: el que te conecta con la naturaleza. Disfrútalo.

 

 

En Rumbo:

Viaje de Lima a Cusco con Latam. Tiempo: cuarenta minutos. Una vez en la Ciudad Imperial, planifique su tour con la agencia de viajes CBC Tupay, situado en la avenida Tullumayo 274 del Centro Histórico del Cusco.

 



Fuente: La República (25 de Setiembre del 2017)