Los efectos macroeconómicos de un dólar más caro se harán más evidentes sobre algunas variables claves como por ejemplo los precios internos, dijo Kurt Burneo, Profesor de CENTRUM PUCP.

DÓLAR Y DINÁMICA DEL PBI

 

AUTOR: Kurt Burneo, Farfán

Profesor - investigador en Centrum PUCP

Describiendo la evolución reciente del tipo de cambio, se evidencia un gradual pero continuo encarecimiento de este. Siguiendo una tendencia promedialmente alcista, el lunes último, por ejemplo, el dólar cerró a S/3.334 mientras que el pasado viernes lo hizo en 3.328.

Siendo una tendencia global el fortalecimiento del dólar, el caso es que los efectos macroeconómicos de un dólar más caro se harán más evidentes sobre algunas variables claves como por ejemplo los precios internos, las cuentas externas, la dinámica del PBI e incluso se afectan decisiones financieras, entre otros aspectos. Por ello no es de extrañar que el BCRP estará más urgido de moderar la volatilidad cambiaria resultante (y pasada la tendencia alcista del nivel también) dada una previsible presión sostenida sobre el dólar, a partir principalmente de factores exógenos a la política macro local. Como pareciera que estos factores exógenos tienen para varios meses más, veamos de cerca este tema y sus implicancias.

En lo fundamental la actual tendencia internacional alcista del tipo de cambio responde a diversos factores: Una cada vez más aceptada presunción de un número mayor de alzas de la tasa de interés por parte de la FED, para responder a presiones inflacionarias en EE. UU., producto de una demanda expandida.

Luego tenemos el efecto de una guerra comercial entre Estados Unidos y China, en la forma de la imposición de aranceles mutuamente, con lo cual el menor intercambio comercial, genera menores flujos de dólares, encareciéndolos. Adicionalmente, las presiones de mayores devaluaciones responden al incremento de la desconfianza de inversores en mercados emergentes, sin diferenciar entre países, dado que una muestra representativa de ellos como el caso de Turquía y Argentina, presentan desequilibrios macroseveros.

En cuanto a los efectos macro de un dólar sostenidamente, más caro desde nuestra perspectiva, podemos referir el efecto sobre el Índice de Precios al Consumidor, vía precios más altos de bienes importados, como también de insumos y bienes de capital importados presionando estos últimos a precios finales, además de probables incrementos de precios de bienes locales que compiten con importaciones. Y es que el efecto sobre precios es la inflación resultante a partir de devaluaciones sostenidas, lo que se constituye como la principal amenaza de no llegar al crecimiento del PBI, excepto que eI BCRP tome la decisión de perder posición de cambios ahora de US$ :38,236 millones o emitiendo certificados de depósitos indexados al tipo de cambio; pero estos no son instrumentos de uso ilimitado, porque en la medida en que se reduzca la posición de cambio del BCRP  y con ello de parte de reservas internacionales, la desconfianza respecto a la sostenibilidad de las intervenciones en el mercado global, hará que se demanden más dólares como una suerte de ataque especulativo.

Derivado de un dólar más caro y su efecto sobre precios internos viene la preocupante amenaza: una mayor inflación, resultante de una sostenida devaluación, que originará una previsible reducción del poder adquisitivo del salario, determinante central junto al empleo del consumo privado, componente a su vez que explica el 65% de esta. Finalmente, siempre diré que identificar problemas anticipadamente se constituye como condición central para pensaren soluciones, no reactiva sino proactivamente.

 


Fuente: Gestión, 12 de setiembre del 2018.