ES NECESARIO PROFUNDIZAR EL PLAN ANTICRISIS

Para muchos analistas, el riesgo en el Perú es la “complacencia” frente a la crisis, que hace que no se quieran tomar medidas, cuando se estima que el shock internacional será aun mayor en el 2009

Hace una semana el gobierno presento el Plan anticrisis, en que se plantean por primera vez medidas que impacten positivamente sobre el sector productivo y se mantenga el ritmo de crecimiento de los últimos años, con el propósito de mantener el empleo y seguir reduciendo la pobreza en el 2009.

Desde diversos sectores, se había solicitado que el Gobierno impulsara medidas concretas para enfrentar la situación económica por la que podría atravesar el país, si es que la crisis internacional se prolonga.

La presentación de este plan  era imperativo por que solamente el Gobierno había anunciado medidas por separado que no terminaban de generar un shock de confianza al sector privado.

De acuerdo a las encuestas que realiza el BCR, la percepción de los empresarios respecto a que la economía estaría mejor en tres meses, se redujo de 44% en Mayo  del 2008 al 17% en Octubre, por lo que era fundamental revertir esa tendencia.

Ello era importante hacerlo porque si bien todos los analistas consideran que el Perú esta en mejor posición para enfrentar la crisis, ello no significa que estemos completamente “blindados” y que no nos vamos a perjudicar.

Justamente, para muchos analistas, el riesgo en el Perú es la “complacencia” frente a la crisis, que hace que no se quieran tomar medidas, cuando se estima que el shock internacional  será aun mayor en el 2009.

Efectos de la crisis internacional

La crisis financiera norteamericana solo se puede comparar con la de los años 30  que fue una catástrofe. Debido a ello, se espera una recesión global que nos va a tocar,  cuyos efectos directos serán una caída en el valor de las exportaciones por menores precios de nuestros principales commodities. Esto generará menor recaudación por impuesto a la Renta, principalmente de las mineras, que tendrá  efectos en el gasto público. Así como  la salida de capitales. Habría también una caída en los términos de intercambio.

Puede generarse como en anteriores oportunidades una crisis de balanza de pagos, que genere una escasez de dólares que presione al alza el tipo de cambio y, por lo tanto, provoque una subida de la inflación. Por ello, la condición para mantener el orden macroeconómico es disponer de reservas, pues si estas se pierden, se pierde, a su vez, el control sobre el tipo de cambio, lo que generará más inflación.

Los encajes nos son una solución, pues actúan por el lado de la demanda, y el problema es que afuera los bancos no quieren prestar dinero ( hay menores líneas de crédito), por lo que localmente se encarece el crédito. Los bancos locales han acumulado un endeudamiento externo  fuerte.

Nadie sabe cuanto durará la crisis. Si dura 2 años y utilizamos nuestras reservas nos quedamos sin colchón, por lo que es necesario que el Gobierno se prepare para un escenario a mediano plazo. Es decir, debe actuar impulsando políticas públicas activas, poniéndose en el peor escenario.

Hay que tener presente que las inversiones en muchos sectores industriales se programaron para un crecimiento en el 2009 y el 2010 de 8 a 9%, sin embargo, los planes de inversión se están revisando para un crecimiento de 5 a 6%. En el caso peruano,  se puede estimar que la economía crecerá un 6%, mientras que la industria manufacturera lo hará en un 5%, nivel inferior al que se producirá en el 2008, en que se espera un crecimiento de la industria  de alrededor del 9.5%.

Efectos en e sector real

Los efectos de los cambios en el escenario internacional por las crisis en los EE.UU., verían en el Perú a través de la balanza comercial y la cuenta financiera. El 19% de las exportaciones del Perú se dirigen  hacia EE.UU., por lo tanto la menor demando por exportaciones de este país afectarla negativamente los términos de intercambio y los volúmenes de exportación. Tenemos ejemplos claros: Las exportaciones de espárragos frescos o refrigerados, principal producto agroindustrial exportado a los EE.UU., han venido cayendo en los últimos meses, producto  de los menores precios en el mercado norteamericano. Por otro lado, las exportaciones del sector textil –confecciones hacia los EE.UU., se han venido desacelerando, en los últimos meses, producto de menores volúmenes enviados hacia ese país.

Medidas:

En este sentido, es positivo que se haya anunciado este plan anticrisis; cuyo principal componente reactivador es el incremento de la inversión pública, que se quiera seguir impulsando el sector construcción por su conocido eslabonamiento con otros sectores; así como se implementen mecanismo de fortalecimiento de las Pyme y a los programas sociales.

Con las medidas anunciadas, queda la sensación de que se está privilegiando, a sin ninguna intencionalidad perversa, a la gran empresa que, si bien es necesaria por los grandes niveles de inversión, no es suficiente para superar la crisis.

Por tanto, es necesario detallar las medidas específicas que ayudarán a las pequeñas y medianas empresas a enfrentar adecuadamente este período de extrema turbulencia, en los que los mercados internacionales estarán deprimidos y se tenga que actuar fundamentalmente en el mercado interno.

Una medida acertada  es el impulso a un agresivo programa de compras públicas de bienes de origen nacional. Este programa, que ya mostró su eficacia hace una década atrás, permitirá justamente a las Pyme mantener sus niveles de producción, pero para ello se tiene que comenzar a trabajar en esta medida para que se pueda aprovechar  la campaña escolar que se avecina.

Sin embargo, no han quedado claros algunos aspectos de este plan, especialmente en lo concerniente a las medidas específicas referidas a la generación de inversiones y medidas para incrementar la productividad, como es el caso de promover la innovación y la capacitación,  que son elementos sustanciales para elevar la competitividad de las empresas. Esperamos  que con el aporte de los gremios empresariales se complete un plan, de manera que no se interrumpa la dinámica de crecimiento  que tenemos desde el 2001.

Fuente: Industria Peruana