BARACK OBAMA FIRMA LEY PARA EVITAR OTRA CRISIS FINANCIERA


Contribuyentes ya no pagarán otros rescates debido a la especulación.
Se implementarán nuevas medidas para proteger a consumidores

 

 


El presidente estadounidense, Barack Obama, hizo historia ayer al promulgar la mayor reforma financiera desde 1929, esperando evitar de ese modo que se repita una crisis devastadora como la que puso a su país al borde del abismo en los últimos tres años.
La ley, que algunos republicanos se han comprometido a revertir, introduce nuevas medidas de protección para los consumidores, reduce el poder de los grandes bancos y ataca prácticas engañosas por parte de las empresas de tarjetas de crédito.
“Debido a esta ley, el pueblo estadounidense jamás volverá a pagar por los errores de Wall Street. No habrá más rescates con dinero de los contribuyentes”, prometió Obama al promulgar la ley.


Con el fin de restaurar la confianza de los estadounidenses en su liderazgo económico, en tiempos en que el desempleo roza el 10%, Obama señaló que la ley reparará las fracturas y abusos gracias a los cuales se generó la crisis financiera.
“Fue una crisis nacida de la ausencia de responsabilidades, desde ciertos rincones de Wall Street hasta los salones de poder en Washington”, apuntó el presidente.


“Estas reformas representan las más fuertes salvaguardas de la historia para el consumidor”, dijo Obama antes de promulgar el documento aprobado por el Congreso la semana pasada.
“Estas salvaguardas serán ejercidas por un nuevo protector del consumidor con una única tarea: vigilar en favor del pueblo –no de los grandes bancos, no de los prestamistas, no de los fondos de inversión– en el sistema financiero.”
 


Críticas
La ley atravesó las aguas del Congreso con el apoyo de un puñado de votos republicanos, ya que los opositores no cejan en sus intentos por bloquear las reformas de Obama.
Republicanos condenaron ayer la nueva ley al afirmar que minará el crecimiento económico y atenazará la capacidad de acción de los gigantes financieros estadounidenses.

El presidente del Comité Nacional Republicano, Michael Steele, acusó a Obama de intentar convencer a los “estadounidenses de que hace todo lo que puede para bajar el desempleo”.
“El presidente Obama ha convertido en ley un mastodonte de 2,300 páginas que cargará a la comunidad de negocios con consecuencias innumerables e inintencionadas, crédito restringido y decenas de reglas que matan el empleo.”

La medida ha generado críticas y elogios entre economistas y analistas, pero algunos republicanos planean revertirla, como el líder en la Cámara de Representantes, John Boehner.
“La ley debe ser rechazada” y reemplazada con “cosas de sentido común que podemos hacer para tapar los agujeros en el sistema regulatorio”, afirmó.


Contra créditos engañosos
El presidente Obama, que registra récords de impopularidad en algunas encuestas y enfrenta elecciones legislativas de medio período en noviembre, espera que la reforma financiera se vuelva popular, pero buena parte de la ley, al igual que la reforma de la salud aprobada en marzo pasado, es tan complicada que demorará meses en ser efectiva.


Por ejemplo, la nueva Oficina de Protección Financiera del Consumidor, encargada de proteger a los estadounidenses de prácticas crediticias engañosas y tarifas ocultas cuando solicitan una hipoteca o una tarjeta de crédito, no entrará en acción hasta dentro de un año.
En un intento por destacar la ayuda que la reforma brindará, Obama promulgó la ley junto a varias personas que sufrieron un trato deshonesto por parte de bancos y empresas de tarjetas de crédito.


Principales reformas
Aumento de la supervisión gubernamental: se crea un consejo supervisor de 10 miembros que vigilará los principales problemas en todo el sistema financiero. El Departamento del Tesoro podrá imponer regulaciones más estrictas a las compañías de mayores dimensiones.
Liquidación de bancos: los reguladores tendrán más atribuciones para liquidar las compañías bancarias que hayan crecido demasiado, pero solo si alguna de estas firmas amenaza con desestabilizar el sistema financiero.

Atribuciones para liquidar las firmas financieras: la Corporación Federal de Seguro de Depósitos (FDIC, en inglés) tendrá autoridad para liquidar las firmas financieras gigantes de la misma manera que puede hacerlo con los bancos.
Seguro de depósitos: la legislación convierte en permanente la cifra de hasta 250 mil dólares en la garantía del Gobierno federal para los depósitos en bancos, cajas de ahorro y entidades de crédito mutuo, con retroactividad al 1 de enero de 2008.

Los bancos que forman “paquetes de especulación” deberán conservar un 5% del riesgo de crédito en sus propias hojas de balance. La legislación impide que las mayores firmas financieras especulen con sus propios fondos.

Auditoría de la Reserva Federal: la legislación permitirá que el Congreso ordene a su Oficina de Contraloría una revisión de las actividades del banco central, excepto la política monetaria.

Hipotecas: se establecerán normas mínimas nacionales para las hipotecas de vivienda. Los prestamistas, por primera vez, deberán asegurar que el prestatario puede pagar el préstamo verificando el historial de crédito y el empleo del solicitante.


Fuente: Diario El Peruano (22/07/10)