IMPONDRÁN  SANCIONES POR DÉFICIT EXCESIVO
 


Francia y Alemania proponen que los países con déficit excesivo sean sancionados al cabo de seis meses, según anunciaron el presidente francés, Nicolás Sarkozy, y la canciller federal alemana, Ángela Merkel.

 

 


Ambos apoyaron además que el Consejo Europeo pueda decidir, por mayoría cualificada, imponer esas sanciones, con carácter preventivo, a un Estado que se encamina a incumplir las reglas del Pacto de Estabilidad.

El anuncio lo hicieron los dos mandatarios en una declaración conjunta en Deauville (noroeste de Francia) poco después de que trascendiera que los ministros de Finanzas de la UE, reunidos en Luxemburgo, han acordado hoy una reforma de la disciplina fiscal que incluirá un mecanismo de activación de las sanciones más automático y menos dependiente del consenso.

No obstante, los países miembros de la UE se han reservado la potestad de poder vetar las multas y dar una segunda oportunidad a los infractores antes de sancionarlos.

En su declaración conjunta, Sarkozy y Merkel expresan su intención de pedir la revisión de los tratados de la UE para disponer de mecanismos más eficaces de reacción en caso de nuevas crisis.

Los principales objetivos de esa revisión serían poder imponer sanciones políticas y que las entidades privadas también contribuyan a los dispositivos de salvamento "para que cada uno asuma sus responsabilidades", según explicó Merkel ante la prensa.

"La crisis financiera ha mostrado la necesidad de una reforma de nuestros procedimientos. Para corregir nuestros déficit tenemos que coordinar mejor nuestras políticas económicas", argumentó el presidente francés al explicar la iniciativa conjunta con Merkel.

Eso pasa -señaló- por que "un Estado con déficit excesivo que no haya tomado en seis meses las medidas de recuperación necesarias será sancionado".

Además, "el Consejo podría decidir por mayoría cualificada sanciones si un Estado no reduce lo suficiente su déficit", añadió Sarkozy, quien destacó que la propuesta franco-alemana implica "procedimientos más cortos y más eficaces" y "preservar el papel del Consejo Europeo. Es él el que debe decidir por mayoría cualificada".

Para la revisión de los tratados, París y Berlín van a encargar al presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, que haga propuestas al respecto.

En este caso, se trata de que el mecanismo de apoyo de los países en dificultades, que tiene vigencia hasta 2013, pueda tener un carácter "perenne para garantizar la estabilidad financiera de la zona euro", de acuerdo con el jefe de Estado francés.

Merkel puso el acento en que "habrá que revisar los tratados para que en el caso de que se produzca una nueva crisis, estén asociados los acreedores privados", ya que "cada cual tiene que asumir sus responsabilidades: es una de las principales enseñanzas de esta crisis".

Los dos mandatarios, que esta noche celebran una cena de trabajo en Deauville con el presidente ruso, Dmitri Medvédev, avanzaron que van a actuar "concertados" durante la presidencia francesa del G20 que se iniciará tras la cumbre de noviembre en Seúl.

Esa presidencia "será capital" por tratarse de la primera tras la crisis, comentó Merkel, al tiempo que Sarkozy afirmó que la acción común de los dos países en las prioridades que París se ha fijado se aplicará "en especial en el nuevo orden monetario".

Una forma de referirse a lo que algunos llaman "la guerra de las divisas" por los continuos reproches mutuos de los grandes bloques económicos -Europa, Estados Unidos, Japón y China- sobre maniobras para controlar la cotización de sus divisas.



Fuente: www.elperiodico.com.mx