REESTRUCTURACIÓN BANCARIA Y RECUPERACIÓN
 


Por Michael Noonan

 

 

El nuevo Gobierno de Irlanda se ha comprometido a arreglar el sistema bancario. Los resultados de las pruebas de resistencia anunciadas ayer muestran que no hay lugar para más paños tibios. Hay que tomar urgentemente pasos dolorosos y decisivos para devolver la salud a los bancos e infundir confianza en el sistema financiero. Irlanda necesita un sistema bancario más pequeño y sostenible, que encaje con sus objetivos y las necesidades de una economía real. Ya se ha impuesto un duro marco regulador financiero, pero aun así se requiere una reestructuración radical del sector. La respuesta del Gobierno será rápida y supondrá un cambio completo del paisaje actual, con dos bancos surgiendo como los pilares del nuevo sistema.

Saldaremos nuestras deudas pero debemos asegurarnos de que el coste sea sostenible

Muchos observadores se preguntarán -comprensiblemente- sobre la fiabilidad de estas pruebas de solvencia, sobre todo por la experiencia del año pasado. Pero los escépticos pueden estar seguros de que estas pruebas han sido más detalladas e intensas. Se ha publicado mucha más información y las conclusiones han sido validadas por reputados consultores externos. Diversas consultorías internacionales de renombre participaron; los resultados han sido validados también por los órganos regulatorios de Francia e Italia; el proceso se llevó a cabo en consulta con la Comisión Europea, el BCE y el FMI. Ciertamente, la base de estas pruebas es bastante más exigente que la que será aplicable respecto a las pruebas de resistencia a nivel europeo.

Ahora que disponemos de estas cifras, el reto que ha de encarar el Gobierno es el de trazar un camino que nos saque del abismo hacia una recuperación sostenible y asegurarse de que tengamos un sistema bancario sostenible.

Las cifras son sombrías. Los bancos ahora necesitan otros 24.000 millones de euros. Incluyendo los 46.000 millones comprometidos por el Gobierno anterior, el Estado inyectará en dos años aproximadamente un 45% del PIB a los bancos. Hay que subrayar que las cifras son considerablemente inferiores a la contingencia incluida para bancos en el programa UE/FMI.

Nuestro objetivo es fortalecer un sistema fiscal sostenible separando el riesgo bancario de aquel del Estado. Esto requerirá un importante apoyo estatal. Por supuesto que saldaremos nuestras deudas, pero debemos asegurarnos de que el coste de la deuda es sostenible.

La Unión Europea ha ayudado a hacer de Irlanda el país emprendedor que es hoy, y agradecemos enormemente esta solidaridad. Es de interés para todos que este apoyo sea reembolsado por los bancos y podemos asegurarnos de que esto ocurra impulsando políticas que fomenten el crecimiento y estimulen la confianza de los mercados. Las perspectivas de Irlanda son alentadoras: la producción industrial ha crecido, nuestra competitividad mejora y las exportaciones de mercancías y servicios alcanzan niveles sin precedentes.

Las duras decisiones que se están tomando ahora sobre el sector bancario forman parte, por tanto, de una mezcla más amplia de políticas enfocadas a devolver la confianza a la economía en su totalidad -confianza para invertir, confianza para emplear y confianza para gastar- y al mejorar las condiciones económicas, los mercados internacionales deberán abrirse de nuevo a nuestros bancos y ayudar a quitar la carga al contribuyente irlandés y a nuestros amigos europeos.


Michael Noonan es ministro de Finanzas de Irlanda
 

Fuente: www.elpais.com