China ya es considerada como la nueva superpotencia mundial

 

(Bloomberg) Personas de todo el mundo ven a Estados Unidos como una superpotencia en declive y a China como un país en condiciones de reemplazarlo, según una encuesta internacional llevada a cabo por el Pew Research Center.

El sondeo muestra que los habitantes de muchos países ya consideran a China la principal potencia económica. Entre los 39 países que participaron en la encuesta, seis –incluidos Estados Unidos y Japón- tuvieron pluralidades o mayorías que dijeron que China nunca reemplazará a Estados Unidos.

“Independientemente de qué país sea visto como la potencia económica, muchos públicos creen que China con el tiempo reemplazará a EE.UU. como primera superpotencia mundial, si es que ya no lo ha hecho”, según el informe presentado por el Proyecto de Actitudes Mundiales del Pew Center.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos de París dijo en un informe en marzo que la economía de China, hoy la segunda del mundo en dimensiones, va camino a superar a la de los Estados Unidos en el 2016 aproximadamente, cuando se realiza el ajuste de poder adquisitivo relativo.

China tiene que cerrar una brecha económica para poder hacerlo. Su Producto Bruto Interno de US$ 8.23 billones el año pasado fue alrededor de la mitad de los US$ 15.68 billones de los Estados Unidos, según los datos del Fondo Monetario Internacional. Esa brecha se estrecha cuando se toma en cuenta el poder adquisitivo, colocando la producción de China en US$12.41 billones, según el FMI.

Las fuerzas militares chinas tienen un atraso de décadas respecto de las de los EE.UU., en tanto los chinos están trabajando para desarrollar sus primeros portaaviones y ampliar su arsenal de misiles balísticos.

Las conclusiones generales del informe Pew quedaron sintetizadas en el título: “La imagen mundial de los Estados Unidos sigue siendo más positiva que la de China pero muchos prevén que China se convertirá en la primera potencia del mundo”.

OTROSÍ DIGO
Socios. En los países encuestados, Pew encontró que una mediana de 63% daba a EE.UU. una calificación favorable, frente a 50% en el caso de China. Los consultados en muchos países expresaron preocupación por el ascenso de China. “En el mundo, es más probable que las personas consideren a EE.UU. un socio de su país más que China, pero, no los ven como enemigo”.

Fuente: Diario Gestión (19 de julio del 2013)

 

Detroit, la octava ciudad de EE.UU. en declararse en bancarrota desde el 2012

Tiene una deuda de unos 18.000 millones de dólares. Declive de esta urbe se materializó en la pérdida del 60% de sus habitantes desde los años 50

Detroit, la octava ciudad de EE.UU. en declararse en bancarrota desde el 2012
El atardecer en Detroit. (AP)

(EFE). La ciudad de Detroit, que acaba de declarar la mayor bancarrota municipal de la historia estadounidense, eleva a ocho el número de ciudades o condados que se han acogido a este procedimiento desde 2011.

Detroit, en el norte del país y conocida como Motor City por su pujante industria automovilística, ha acumulado una deuda de unos 18.000 millones de dólares.

El declive industrial de la ciudad se ha materializado en la pérdida del 60% de sus habitantes desde los años cincuenta, aunque solo entre 2000 y 2010 experimentó la salida de un cuarto de su población por la crisis económica, dejando partes de la ciudad convertidas en auténticos barrios fantasma.

OTRAS CIUDADES QUE SE DECLARARON EN QUIEBRA
Hace apenas un año, tres ciudades de California -, San Bernardino y Stockton, próximas a Los Ángeles, y la turística Mamonth Lakes- se declararon en quiebra.

San Bernardino, una ciudad con un 60% de población hispana, cayó en julio de 2012 en la bancarrota por la crisis económica y la paralización del mercado de la vivienda.

Los ayuntamientos de Mammonth Lake, el 3 de julio, y Stockton, el 28 de junio, determinaron seguir el mismo camino de Detroit por problemas derivados de la gestión municipal.

En mayo de 2012, la ciudad de Central Falls, en el estado de Rhode Island (este del país), anunció su bancarrota después de acumular una deuda de más de 4.800 millones de dólares. La medida fue aprobada por los tribunales en septiembre de 2012.

La industrial Harrisburg, en el estado de Pensilvania (este del país), se declaró también en quiebra en octubre de 2011 después de años de luchar contra la pesada carga que suponía una deuda superior a los 300 millones de dólares por la construcción de una incineradora. La bancarrota fue rechazada porque las leyes del estado prohíben esta medida a los municipios.

También en 2011, Jefferson County, el mayor condado de Alabama (sur del país), entró en suspensión de pagos después de acumular deudas por un montante de 4.000 millones de dólares, la cifra más alta hasta la declarada por Detroit.

Boise County, en Idaho (centro del país), se acogió en marzo de 2011 a la bancarrota ante los tribunales al no poder hacer frente al pago de 5,4 millones de dólares al que había sido condenado su ayuntamiento por un tribunal. Finalmente, su petición fue rechazada en noviembre tras alcanzar un acuerdo con sus acreedores.

ASÍ ES LA QUIEBRA EN EE.UU.
La quiebra en Estados Unidos es un proceso legal que permite que una persona (física o jurídica) que no pueda afrontar sus obligaciones de pago se descargue de la responsabilidad de afrontar alguna de ellas. Las leyes federales permiten a los gobiernos locales declararse en bancarrota siempre que la misma esté permitida por las leyes del estado.

Cada estado impone sus limitaciones y cuantifica el criterio por el que los municipios pueden acogerse. En Montana, por ejemplo, la mayoría de los municipios puede hacerlo aunque no los condados. En cambio, en Georgia se prohíbe explícitamente la medida.

Fuente: Diario Gestión (21 de Julio del 2013)

 

Gestor de la bancarrota de Detroit no espera que haya un rescate federal

Kevin Orr fue nombrado administrador de emergencia de la ciudad en marzo pasado y es ahora el encargado de gestionar la declaración de quiebra que emitió la urbe el jueves, tras una década de deuda creciente y población menguante enmarcada en una profunda crisis industrial.

El encargado de gestionar la quiebra declarada en Detroit, Kevin Orr, aseguró hoy que no espera que el gobierno y el Congreso de Estados Unidos emprendan un rescate de las finanzas locales, algo con lo que coincidió el alcalde de la ciudad, Dave Bing. 

"No estamos esperando que entre la caballería. Somos nosotros los que hemos cavado este hoyo", dijo Orr a la cadena Fox News, ante la pregunta de si anticipaba un rescate federal. 

Orr fue nombrado administrador de emergencia de la ciudad en marzo pasado y es ahora el encargado de gestionar la declaración de quiebra que emitió la urbe el jueves, tras una década de deuda creciente y población menguante enmarcada en una profunda crisis industrial. 

El alcalde Bing coincidió en que no espera que haya un rescate federal a corto plazo. 

"Todavía no", dijo el alcalde de la ciudad cuna de la industria automotriz de EE.UU. en una entrevista en la cadena ABC. 

El vicepresidente de Estados Unidos, Joseph Biden, indicó que el gobierno federal está evaluando las opciones que tiene ante la quiebra de Detroit, lo que deja abierta la puerta a la posibilidad de un rescate. 

"En mi opinión, la esperanza (de ayuda externa) no puede ser la estrategia", señaló hoy Orr. "Creo que Detroit tiene la responsabilidad de ayudarse a sí misma. Si además consigue otra asistencia, genial", agregó. 

El administrador indicó que si bien la bancarrota ha destruido la calificación crediticia de la ciudad, cree que los acreedores volverán una vez que la localidad consiga reestructurarse. 

Bing, por su parte, agradeció el "gran apoyo" que le ha ofrecido el Gobierno de Barack Obama en el proceso, y anticipó que la ciudad sí solicitará algún tipo de ayuda federal. 

"Ya he tenido algunas conversaciones, y daré más detalles en los próximos días y semanas. Pero no estoy seguro de qué pedir. Quiero decir, el dinero nos ayudará, eso está claro, pero ¿cuánto?", afirmó. 

El gobernador del estado de Michigan, Rick Snyder, habló también hoy sobre la decisión de declarar la bancarrota en Detroit. 

"Fue una decisión muy difícil, pero es la correcta porque al fin y al cabo lo que necesitamos hacer es crear servicios mejores para los 700.000 residentes de Detroit. No había otras opciones viables", aseguró el republicano Snyder a la cadena NBC. 

La declaración de bancarrota está aún pendiente de la autorización judicial, algo que se complicó el viernes después de que una jueza de Michigan ordenara a la ciudad que retire su solicitud de quiebra por considerar que reduciría pensiones que están protegidas por ley y que viola la Constitución estatal. 

El fiscal general de Michigan, Bill Schuette, presentó una apelación a esa decisión y confía en que el proceso se acelere para conseguir lo antes posible la autorización judicial. 
Bing apuntó hoy que "la Constitución federal está por encima de la estatal" y subrayó que no dejará "que los abogados dicten qué va a pasar con la ciudad y con su recuperación". 

Por su parte, Orr defendió que la ciudad se vio "obligada a solicitar la quiebra" tras años de "miopía" en la gestión de sus finanzas. 

La de Detroit es la mayor suspensión de pagos municipal de la historia estadounidense, con una deuda de US$ 18.500 millones.

Fuente: www.latercera.com (21 de Junio del 2013)