Oportunidades empresariales en una economía de bajo riesgo climático



Por Martín Roberts

La reciente reunión en Lima del Programa para el Liderazgo Sostenible de la Universidad de Cambridge organizada por la Embajada Británica y la Confiep, confirmo la necesidad de desarrollar un modelo de cambio transformacional en las empresas, dirigido a lograr una economía baja en carbono.

El sector empresarial esta reconociendo, a nivel mundial, la necesidad del cambio con una visión de largo plazo, pero aun carece de marcos claros. Si quieren seguir siendo competitivas, las empresas necesitaran desarrollar estrategias ante el inminente cambio climático mundial.

Una respuesta estratégica a este desafío constituye entonces una buena práctica de negocios que permita a las empresas demostrar una gestión de riesgos responsable. Las empresas que prosperaran serán aquellas preparadas para enfrentar las implicancias climáticas y que hubieran tomado acciones con la debida anticipación, ofreciendo más “servicios” (energía) que “productos” (combustible). El preguntarse “que servicio brindamos” en lugar de “que producto producimos” ayudara a establecer una mayor flexibilidad para enfrentar desafíos inevitables en el futuro.

El valor social y del mercado, serán los parámetros con los cuales se medirá el éxito, aumentando la fidelidad a las marcas, la satisfacción y la confianza del consumidor.

Los países en desarrollo podrían “saltar” fases del desarrollo tecnológico y así mantenerse al margen de infraestructuras ineficientes que utilizan combustibles fósiles. Esto puede ser atractivo para la inversión y dar lugar a innovaciones en los negocios y a nuevas empresas. Otras oportunidades son añadir valor a las empresas con nuevos servicios basados en el conocimiento (investigación, nuevas tecnologías) y la posibilidad se beneficiarse de mecanismos financieros internacionales, como los bonos de carbono, el comercio de emisiones y la reducción de emisiones de la deforestación y la degradación.

El Perú es uno de los países que sentirán más fuertes los impactos climáticos y tiene excelentes oportunidades para la mitigación climática. La protección de los bosques tropicales y el uso más sostenible del suelo ofrecen nuevas oportunidades para las empresas. Los créditos de carbono y de “conservación de la biodiversidad” podrían crear el potencial para generar recursos financieros.

El cambio climático podría ser el estimulo que tanto se necesita para la recuperación económica, ofreciendo el potencial de engendrar un nuevo sistema basado en un “crecimiento ecológicamente sostenible”, particularmente en el contexto de las actuales nuevas actitudes y políticas estadounidenses. El sector empresarial podrá beneficiarse de este gigantesco desafío, que sin embargo es la mas estimulante oportunidad que la humanidad haya afrontado –la motivación para la innovación, la incentiva, la capacidad de reinventarse y el pensamiento creativo nunca han sido tan imperiosos.