Café del norte, con mucho aroma y poco ruido

 

Cuando en los últimos años se ha hablado del boom agro exportador, se ha destacado sobre todo al espárrago, las uvas, los mangos y las paltas, pero poco o casi nada se ha dicho del café. Sin embargo, algo muy importante ha estado pasando con este cultivo, que se presenta principalmente en zonas de selva alta en el centro y en el norte del país.
Fernando Eguren, experto en temas agrarios, señalaba en un artículo que el Perú se había convertido en el primer exportador del mundo de café gourmet, además de producir otras variedades de granos. Además, menciona que la casi totalidad de productores cafetaleros son pequeños, a diferencia de lo que ocurre con los otros cultivos de agro exportación, cuyos propietarios vienen implementando un proceso de concentración de propiedad de la tierra rural en el país.
Las últimas informaciones confirman la buena salud de la que goza el café en el Perú, pese a la indiferencia y varias amenazas. Los aumentos de la producción y exportación del café no cesan: en el 2008, el aumento de la producción cafetalera en el Perú llegó a un 30%, las exportaciones en los últimos cinco años superan los dos mil millones de dólares –según la Junta Nacional del Café– y el área en la que se cultiva llega a las 370 mil hectáreas. Pese a que las perspectivas por la crisis internacional no son las mejores, es importante destacar el esfuerzo que vienen realizando los pequeños productores de la selva central, el norte y también de otras regiones del país.
En cuanto a zonas de producción de café se han presentado algunos cambios importantes en los últimos años. Si bien hasta hace muy poco los productores de Chanchamayo, en la región Junín, concentraban alrededor del 50% de la producción nacional, hoy en día Piura da cuenta del 60% de la producción de café, gracias a los esfuerzos de tecnificación, mayor productividad, cultivos orgánicos, experiencias de reforestación, que se han dado en esa región.
¿Dónde se ubican estas extraordinarias experiencias productivas en el norte del país? En las provincias piuranas de Huancabamba, Ayabaca (sierra de Piura) y Morropón; en distritos como Montero, Carmen de la Frontera, San Miguel del Faique, Sondor, Canchaque, Pacaipampa. Precisamente allí –o muy cerca–, de donde la empresa china Zijing, propietaria del cuestionado proyecto minero Río Blanco (ex Majaz), acaba de recibir la autorización del Ministerio de Defensa del Perú para terminar de adquirir 35 derechos mineros que equivalen a algo más de 28 mil hectáreas. Cabe señalar que en la misma zona, aparte de Zijing, están operando otras empresas y exploradores de origen chino, como Junefield Group, Andrea Gold y New Huancabamba.
Además de los retos de la crisis, los productores de café de Piura y de las vecinas provincias cajamarquinas de Jaén y San Ignacio han mostrado su preocupación por la pretendida conversión de esa zona en un nuevo distrito minero que amenaza sus cultivos, certificaciones internacionales obtenidas y su desarrollo productivo.
¿Tiene sentido poner en riesgo esta importante experiencia productiva? ¿Por qué no se declara de necesidad pública el impulso a la producción de café que tiene extraordinarias perspectivas y cuyo desarrollo, con producción orgánica, va de la mano con la protección de una zona que presta extraordinarios servicios ambientales a Piura y a toda la zona norte del Perú? Planificar el uso sostenible de nuestros recursos y las actividades productivas que se realizan en el territorio sigue siendo una tarea pendiente en el país.