¿SE VIENE EL CONSENSO DE BEIJING?

Raúl García

La década de los noventa se caracterizó por las políticas económicas, recomendadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el Banco Mundial (BM) y el Tesoro de los Estados Unidos conocidas como el Consenso de Washington. Ante la crisis financiera desatada el año pasado en Estados Unidos y que hoy es ya una crisis económica ¿se está gestando, desde China, un nuevo modelo económico a imitar? ¿estaremos ante el nacimiento de un Consenso de Beijing?
Para hacer un poquito de historia diremos que el Consenso de Washington fue presentado como documento de trabajo por el economista John Williamson del Institute for International Economics en noviembre de 1989. Allí se mencionaban diez políticas económicas necesarias para promover el crecimiento de los países, a saber:

1) Disciplina fiscal;

2) Reordenamiento de las prioridades del gasto público;

3) Reforma Impositiva;

4) Liberalización de las tasas de interés;

5) Una tasa de cambio competitiva;

6) Liberalización del comercio internacional;

7) Liberalización de la entrada de inversiones extranjeras directas;

8) Privatización;

9) Desregulación y

10) Derechos de propiedad.

El pasado jueves 23 de abril el Washington Post publicó una nota titulada “China utiliza la crisis global para afirmar su influencia”. En ella se relatan anécdotas del convenio de préstamo que China celebró con Jamaica por 138 millones de dólares y se aprovecha la oportunidad para comentar aspectos de la estrategia del gobierno chino para erigirse en protagonista de escena internacional. Por lo pronto, parece quiere asumir el rol de principal financiador de los países emergentes sean estos de Asia, África o Latinoamérica.

Los funcionarios y académicos chinos aprovechan cada oportunidad que tienen en foros internacionales para criticar ácidamente las decisiones de las sociedades occidentales de estilo capitalista. No dejan de presagiar riesgos excesivos para quienes atesoran dólares o euros. Insisten en crear una nueva divisa que se constituya en la moneda de reserva del mundo que reemplace al dólar.
¿Y qué políticas caracterizarían a este Consenso de Beijing? Según Cheng Enfu, economista investigador de la Academia de Ciencias Sociales de China, el programa consistiría en:

1) Promoción de las economías en las cuales la propiedad estatal sigue siendo dominante;

2) Políticas que impliquen cambios graduales son preferibles a aquellas que generan violentos cambios de un día para otro (shock);

3) Apertura al comercio exterior pero con la impronta de la protección a la industria local;

4) Reformas de mercado de gran escala se adoptan primero y, luego, son seguidas por reformas en lo político y cultural.

En mi opinión los chinos son concientes de la debilidad política y económica por la que está atravesando Estados Unidos y aprovechan la oportunidad para: a) fortalecer su posición en el contexto internacional y b) advertir a Estados Unidos de no imprimir dólares alocadamente para financiar sus déficits. Lo que hasta aquí muestran como un programa con ambiciones de convertirse en un modelo económico no es más que un ambiguo conjunto de consideraciones políticas y económicas, sin entrar a considerar el bajo respeto que las autoridades chinas tienen por las instituciones democráticas que tanto apreciamos en occidente.

Publicado el 26 de Abril de 2009