¿Es el Perú atractivo para la inversión minera?

¿Qué tan competitivos somos con respecto a otros países para atraer inversión minera? ¿Qué nos impide atraer más del monto de inversiones mencionadas?

 

Víctor Burga*

Basta recordar los anuncios efectuados en la 29° Convención Minera, realizada en Arequipa en setiembre pasado, para responder a esta pregunta. Según cifras proporcionadas durante dicho evento, existen 35 proyectos por ejecutarse con una inversión mínima de 24 mil millones de dólares. Sin embargo, quedan flotando varias interrogantes: ¿Qué tan competitivos somos con respecto a otros países para atraer inversión minera? ¿Qué nos impide atraer más del monto de inversiones mencionadas?

Anualmente, el Instituto Fraser efectúa una encuesta anual que busca identificar aquellas jurisdicciones que tienen un clima de negocios más favorable para las inversiones mineras, y aquellas que necesitan mejorar.

La encuesta realizada para el periodo 2008/2009 contiene respuestas de 658 compañías ubicadas en 71 jurisdicciones alrededor del mundo, y nos permite sacar conclusiones interesantes. Este estudio analiza 13 factores que contribuyen a la capacidad de una determinada jurisdicción para atraer inversiones mineras: incertidumbre respecto a la administración e interpretación de las actuales regulaciones, medio ambiente, inconsistencia y duplicación de regulaciones, régimen tributario, incertidumbre relacionada con las comunidades, incertidumbre relacionada con las áreas protegidas, calidad de la infraestructura, acuerdos sociales con el gobierno y las comunidades, estabilidad política, regulaciones laborales, información geológica, seguridad, disponibilidad de mano de obra, potencial minero asumiendo la regulación actual, y potencial minero asumiendo que no hay regulación, ni existe restricción de concesiones.

En el mencionado estudio, el Perú se ubica en el puesto 30 de 71 jurisdicciones, y a nivel de América, sin considerar Estados Unidos y Canadá, sólo somos superados por Chile (puesto 7) y México (puesto 28). Es razonable decir, basándose en este ranking a nivel Latinoamérica, que nos encontramos bien posicionados.

 

 

En términos de potencial minero, régimen tributario, y regulación actual, nuestro país tiene una ponderación bastante buena, a pesar de que algunos opinan que existen ciertas dificultades que vienen impidiendo una inversión minera más agresiva.

Sin embargo, existen otros factores en los que los resultados del estudio no se presentan tan halagadores. Por ejemplo, la incertidumbre con las comunidades nativas y áreas protegidas, la calidad de la infraestructura (acceso a carreteras, disponibilidad de energía, entre otros), seguridad (ataques terroristas, entre otros), y estabilidad política . Indicadores no tan favorables para el Perú.

 

 

 

 

Por ejemplo, el 50% de las empresas encuestadas considera que las relaciones con las comunidades es un factor que viene impidiendo la inversión minera en el Perú. Asimismo, el 59% considera que la infraestructura es de mediana o baja calidad, lo cual evidentemente, afecta la rentabilidad de los proyectos mineros.

Finalmente, el 51% de los encuestados muestra sus temores con respecto a la inestabilidad política.

Así, el gran reto que se nos presenta como país es lograr captar inversión minera que se destina a países como Chile y México. Tenemos todo el potencial para hacerlo; pero no vamos a tener éxito en el medida en que no demostremos estabilidad política más allá del gobierno de turno, mejoremos aceleradamente la infraestructura nacional, garanticemos la seguridad de las empresas y personas que vienen a invertir, y encontramos la mejor manera de entendernos con las comunidades aledañas.

Cualquier avance que logremos en estos aspectos significará miles de millones de dólares adicionales de inversión, que van a revertir en bien del país.

 

*Socio de Auditoria de Ernst &Young

 

Publicado en Gestión, el 23 de noviembre del 2009