TASAS DE INTERÉS BAJAN EN 2.4 PUNTOS PORCENTUALES, EN PROMEDIO

CRÉDITOS DE CONSUMO EN SOLES SE ABARATAN DURANTE EL VERANO

Reducción de la morosidad, generación de más empleo formal, mayor competencia y efecto rezagado de la política monetaria expansiva explican caída de las tasas de interés de los préstamos de consumo.

En este caluroso verano, el comportamiento de las tasas de interés de los créditos de consumo trae una brisa fresca a los usuarios del sistema financiero. El costo de estos préstamos se viene reduciendo significativamente en lo que va del año.

Al 21 de febrero del 2019, la tasa de interés promedio en soles de los créditos de consumo otorgados por los bancos se ubicó en 42.58%, nivel menor en 2.4 puntos porcentuales al registrado a fin del 2018 (44.94%), según estadísticas de la Superintendencia de Banca, Seguros y APF (SBS).

El costo de financiamiento con tarjetas de crédito, que es parte del segmento de consumo, también disminuyó en 2.2 puntos porcentuales en el mismo periodo, al caer la tasa de interés en soles de los plásticos de 50.36% a 48.15%.

Datos del Banco Central de Reserva (BCR) confirman esta tendencia a la baja de la tasa de interés, principalmente en los préstamos de consumo de corto plazo (hasta 360 días). Esta pasó, en promedio, de 46,7% al 21 de febrero último. Es decir, disminuyó en casi cinco puntos porcentuales en apenas tres meses y tres semanas.

Ya durante el 2018, en un entorno de adecuados niveles de fondos en las entidades financieras y de mayor crecimiento de la economía local, el costo promedio de los créditos de consumo en soles se redujo, según la Asociación de Bancos (Asbanc).

El 93.6% de los préstamos de consumo del sistema financiero está en soles.

Impacto

La tendencia a la baja que muestra la tasa de interés de los créditos de consumo se explica por varios factores, indicaron banqueros consultados por Gestión.

Uno de ellos está vinculado a la política monetaria del BCR. "Se debería al impacto rezagado de la política monetaria (expansiva) del Banco Central", señaló Francisco Grippa, economista jefe del BBVA Research en el Perú.

En Marzo del 2018, fue la última vez que el directorio del BCR recortó la tasa de interés de referencia, en aquella oportunidad, de 3% a 2.75%.

Esta medida suele llevar a la baja la tasa de interés corporativa de formas casi inmediata, mientras que el costo de los créditos de consumo recién se ve el efecto en los siguientes meses, refirió Mario Guerrero, subgerente de Economía Monetaria de Scotiabank.

Menor riesgo

Afirmó que otra explicación de las menores tasas de interés para la deuda de consumo es la reducción de la morosidad en este tipo de préstamos.

La tasa de mora de los créditos de consumo del sistema financiero bajó de 3.7% al cierre del 2017 a 3.32% a fin del 2018, según el BCR.

"La menor morosidad ayuda a disminuir la tasa de interés porque significa un menor riesgo crediticio, implica menores provisiones para los bancos y, por lo tanto, hay un menor encarecimiento del crédito", explicó Guerrero.

Grippa estimó que la aceleración en la generación de empleo formal reportada por el BCR, con información de las planillas electrónicas de Sunat, también favoreció menores costos del financiamiento de las familias. El año pasado el empleo formal total habría crecido entre 3.5% y 4%. "En ese escenario, la percepción de riesgos disminuye y, por lo tanto, las tasas de interés pueden disminuir", sostuvo Grippa.

En esa misma línea, Asbanc sostiene que el retroceso del costo del crédito de consumo coincide con una mejora en diversos índices del mercado laboral peruano, en particular del empleo formal y los niveles de ingresos de las personas.

"Esto determinaría un menor riesgo para los nuevos desembolsos, lo que, aunado a la alta competencia y la mayor eficiencia en la operación bancaria, se ven reflejado en menores tasas de interés", refiere el gremio bancario.

Tecnología

Otro factor, más estructural, que sustenta el abaratamiento del crédito de consumo en los últimos meses es la mejora tecnológica que están llevando a cabo los bancos para lograr eficiencias y ser más competitivos, dijo Guerrero.

Además de eso, ahora las entidades financieras, gracias a los avances tecnológicos, pueden procesar información disponible sobre cada cliente para medir adecuadamente su capacidad de pago. Es decir, su riesgo, indicó Grippa. Entonces, pueden otorgar créditos a personas a las que antes no lo hacían, y a tasas de interés más convenientes, afirmó.

Para Guerrero, las tasas de interés de los préstamos de consumo, sobre todo de corto plazo, podrían disminuir más este año en la medida en la que el BCR no tiene apuro en modificar la actual postura expansiva de su política monetaria.

Hay también una elevada competencia de la banca por atraer y conservar a los mejores clientes en el sector especializado en retail. Banco Ripley indicó que no subirá las tasas de interés para sus clientes este año.

Publicado en Gestión, 25 de febrero del 2019.