LAS CRISIS EMPRESARIALES SUPONEN DEUDAS DE MÁS DE DOS MIL MILLONES DE EUROS ANUALES, SEGÚN UN EXPERTO

 

 

- El profesor de la Universidad de Navarra Eduardo Valpuesta señaló que la nueva Ley Concursal nace con el propósito de resolver este problema

 

"La nueva Ley Concursal nace para resolver problemas de crisis empresariales que suponen deudas de más de dos mil millones de euros por media anual". Así lo afirmó en la Universidad de Navarra el profesor Eduardo Valpuesta durante la Jornada "El impacto de las Normas Internacionales de Contabilidad (NIC) y la Ley Concursal en las PYMES". Esta sesión se enmarca en el foro de formación para empresas organizado por la Fundación Empresa-Universidad de Navarra y Caja Rural.

Eduardo Valpuesta es magistrado suplente en la Audiencia Provincial de Navarra y profesor.

Manuel Castells

El magistrado suplente en la Audiencia Provincial de Navarra y docente del centro académico señaló que no es una ley que prime necesariamente la continuidad de las empresas, pero permitirá que las que estén en crisis "solucionen más fácilmente los problemas transitorios de solvencia y lleguen a acuerdos ventajosos para deudor y acreedores. Sólo las compañías viables económicamente deben continuar. Si la crisis se debe a un problema endémico de falta de rentabilidad es mejor proceder a la liquidación".

Para Eduardo Valpuesta, profesor de Derecho Mercantil de la Universidad de Navarra, existía una clara necesidad de reformar la ley. "La normativa anterior era muy antigua. Se aplicaba, incluso, el Código de comercio de 1829 y las demás normas eran mayoritariamente del siglo XIX. Además, existían hasta cuatro procedimientos distintos y había instituciones claramente perjudiciales, como la posibilidad de declarar la nulidad total de todos los actos realizados por el deudor antes de la declaración de quiebra".

Un procedimiento más ágil, útil, y mejor gestionado

En este sentido, señaló que la nueva Ley Concursal pretende establecer un procedimiento moderno y más rápido para decidir en los casos de crisis económica de las empresas y de cualquier sujeto: "Se simplifica la multiplicidad de procedimientos que existía hasta ahora; se crean los jueces de lo mercantil, especializados en este tipo de asuntos; y se profesionaliza el órgano de administración del concurso. Esto redundará en un procedimiento más ágil, mejor gestionado y útil para todos".

Respecto a las Normas Internacionales de Contabilidad (NIC), indicó que nacen con el propósito de "uniformizar los estados contables de las empresas a nivel mundial, de forma que podamos interpretar los balances de cualquier sociedad extranjera sabiendo cuáles son los criterios que ha tomado en su confección". En este sentido, subrayó que aunque por ahora las NIC son sólo obligatorias para los estados consolidados de sociedades que cotizan en Bolsa, "es un primer paso importante hacia esa unificación de las reglas contables en el ámbito mundial".

 

Fuente: www.unav.es