Desde que la responsabilidad social empresarial (RSE) empezó a formar parte de la actividad de las empresas, fue relacionada principalmente con grandes compañías. Sin embargo, las acciones de RSE también son promovidas por las pequeñas y medianas empresas (pyme), aunque en casos aislados debido a varios factores.
Estrella Peinado-Vara, oficial de proyectos del Fondo Multilateral de Inversiones (Fomin) del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), explica que en la medida en que las empresas son más formales les será más facil adoptar planes de RSE. Por ello, propone que se apoye el proceso de formalización de las pequeñas y medianas empresas para impulsar sus prácticas responsables.
Si se crean las condiciones adecuadas para que las pyme accedan a formalizarse se estará dando el primer paso para que cumplan con sus obligaciones legales, como son los trámites de licencia, el pago de impuestos, entre otros compromisos con el Estado.
Para Carmen Mosquera, especialista del BID, el impulso a la formalización de las pyme debería ser una de las preocupaciones principales del a autoridades. Si se considera que estas empresas tienen, por su alta presencia, un papel económico y social muy importante en los mercados de Latinoamérica, el efecto multiplicador de sus actividades responsables puede ser muy grande. “es necesario un marco legal y administrativo que sea justo e incentive la formalización”, agrega.
Además de crear las condiciones legales, para Peinado-Vara es importante fortalecer a los otros actores. Uno de ellos pueden ser los clientes, quienes exijan alas empresas que sean responsables y soliciten información sobre los productos y métodos de elaboración. Agrega que debe existir una entidad que verifique a las empresas si realizan lo que dicen hacer, y que evalúe los resultados de sus acciones de RSE.
Ampliando el panorama
Para ambas especialistas, las pyme que deseen iniciar políticas de RSE deben hacerlo considerando tres aspectos. En principio, los valores del propietario de la empresa, el entendimiento sobre el tema de RSE, y el nivel de conciencia de que las prácticas responsables son buenas para el negocio.
Las acciones de RSE implican iniciar un proceso de nuevas relaciones de la empresa con los trabajadores, la sociedad y el medioambiente. Están destinadas a lograr un mayor compromiso de los empleados, que en consecuencia conlleve a mejorar la productividad y la calidad de los productos que se elaboran.
Como se sabe, las prácticas empresariales responsables están divididas en externas e internas. De la RSE externa se cree que es más apreciada por la sociedad, pues se hacen obras, programas y actividades que son fácilmente identificadas.
Pero en ocasiones se descuida la RSE interna, es decir, las prácticas para mejorar la calidad de vida y condiciones laborales de los trabajadores. Resulta común que las pyme no realicen prácticas de RSE externa y que desconozcan la interna.
Según las especialistas, la RSE interna es concebida como una acción estratégica a favor de los trabajadores y sus familias. De acuerdo a las apreciaciones de Mosquera, las pyme que practican la RSE lo hacen en relación directa con sus trabajadores.
En menor medida son responsables en las aristas del cuidado medioambiental y la relación con la comunidad. En el primer caso las actividades se aprecian mediante el ahorro de recursos energéticos.
Una vez que se han iniciado las acciones hay que comunicarlas tanto hacia adentro como hacia fuera de la entidad. Así se logra capitalizar aún más la responsabilidad social de la empresa y se transmiten los valores que se están manejando. De esta manera ser repercute en el aumento de la productividad de la organización.
Planes al detalle
Adoptar políticas de RSE no es un trabajo fácil, por el contrario, requiere de planificación. Este proceso se inicia identificando cuáles son las áreas más importantes de la empresa. Luego se evalúa en qué secciones se empezará a aplicar las actividades de RSE para que tengan mayor influencia en beneficio de la entidad, sus trabajadores y la sociedad en general.
Asimismo, hay que tener presente el tipo de empresa, el rubro en que se encuentra, así como su tamaño y estructura.
El análisis interno permite establecer cuál es el estado de la compañía, qué es lo que se quiere lograr y cómo se realizarán las acciones.
El plan se iniciará teniendo en cuenta por qué se están aplicando acciones de RSE. No hay que perder la vista que el propósito es beneficiar a la empresa y a la sociedad, y además debe ser sostenible según transcurra el tiempo.
Las especialistas consultadas coincidieron en mencionar que las estrategias orientadas a incentivar a las pyme de la capital, a que realicen prácticas de RSE, deben ser diferentes a las utilizadas en las medianas y pequeñas empresas de provincias. Bajo la misma diferenciación, se apicarán distintos enfoques considerando si son empresas rurales o urbanas.
Lo ideal sería que dentro de algunos años no se hable de la importancia de la RSE, sino que sea un tema que no tenga que mencionarse como algo extraordinario. Ello será una realidad cuando las empresas practiquen la RSE como un hábito, y demuestren que día a día producen de manera responsable.
Debido a que sus ingresos económicos son menores, en las pequeñas empresas y medianas empresas (pyme) la necesidad de aprendizaje queda relegada a segundo plano. Hay indicios de que la escasa capacitación limita el crecimiento de estas empresas.
Tomando en cuenta esta problemática, ¿cómo se puede incentivar a las pyme para que se capaciten? O ¿cómo se puede impulsar a las instituciones donde se capacitan los líderes a que echen una mirada hacia los pequeños empresarios?
No cabe duda que el aprendizaje y la continua actualización son aspectos muy importantes para el desarrollo de toda entidad comercial. En este sentido, Jon Bickel, representante de Swisscontact en el Perú, menciona que se necesitan programas de información y capacitación para que las pyme puedan elaborar sus propios modelos de actividades de RSE.
A la hora de capacitar a lo pequeños y medianos empresarios, así como a los que planean serlo, es necesario informarles sobre acciones de RSE que podrían realizar en determinados momentos. Se les puede introducir a aspectos relacionados al medioambiente, la comunidad y la organización en sí.
Sería un gran avance crear negocios responsables desde el inicio. El impacto siempre será mucho más positivo para la empresa y para la sociedad.