LLOGÓ EL MOMENTO DE RELAJAR LOS CANDADOS FÍSCALES

A finales de diciembre del año pasado, el Ejecutivo  hizo  uso de la cláusula de excepción de  las reglas fiscales que, en caso de desastres o choques externos  significativos, permiten modificar los límites de la deuda pública y del déficit  fiscal. 
  
Mediante el Decreto de Urgencia 032-2019, el Ejecutivo  dispuso aplazar la meta de déficit fiscal de 1% del PBI, que estaba prevista  que se alcance en el 2021, hacia el 2024, aunque dicho año no está explícito en  el documento.
El decreto de urgencia solo se limita a precisar que para el  año del bicentenario, el déficit no deberá exceder el 1,8% del PBI, para el  2022 el 1,6% y para el 2023 el 1,3%. El argumento de la normativa es que la  holgura fiscal se destinará al financiamiento de proyectos de infraestructura.
"Es importante poner en marcha proyectos relevantes que  cierren brechas de infraestructura e impulsen el crecimiento potencial de la  economía (...), lo que implica la necesidad de que la programación multianual  presupuestaria del 2021-2023 cuente con espacio fiscal para continuar  expandiendo la inversión pública", precisa el documento del Ejecutivo.
Asimismo, el decreto faculta el uso de los fondos de la  Cuenta Única de Tesoro, a fin de minimizar el impacto del déficit fiscal sobre  la deuda pública. 
No obstante, la medida recibió algunas observaciones del  Consejo Fiscal , colegiado que tiene por finalidad contribuir con el análisis  técnico independiente de la política fiscal.
"El consejo Fiscal exhorta a que la modificación a las  reglas fiscales se realicen dentro de los conductos establecidos en el marco  legal, con la finalidad de evitar cambios a las reglas fiscales que resten  predictibilidad a la política fiscal, y consecuentemente, a la estabilidad  macro", indicó en su informe.
  De acuerdo con la ley de Responsabilidad y Transparencia  Fiscal, ante un cambio en las reglas fiscales, el Ministerio de Economía debe  publicar, en forma excepcional, un informe con las principales variables  macroeconómicas y fiscales del  Macroeconómico Multianual.
Asimismo es deber del Consejo Fiscal emitir opinión sobre cambios de las reglas.
Las observaciones 
  
Una de las primeras críticas del Consejo Fiscal es que la  convergencia del déficit fiscal a 1% del PBI en el 2024, tal como lo establece  el decreto de urgencia del Ejecutivo, debió indicarse en forma explícita y no  como ha sido considerada en el documento.
  
Por otro lado, el colegiado observó que si bien con la  ampliación del déficit se permite que el proceso de consolidación fiscal sea más  moderado, este aplazamiento afectará a la próxima administración, dado que la  vigente culmina a mediados del 2021.
  
También Consejo Fiscal precisa que hay un conjunto de riesgos asociados a la capacidad de ejecución de la inversión pública que podría llevar a que la ampliación del déficit se destine a compensar menores ingresos fiscales o incrementar gastos corrientes.
Por último, la institución afirmas que está preocupada por los riesgos de sostenibilidad de la deuda pública, generada por un sesgo optimista en el crecimiento económico, que podrían sobreestimar la capacidad del gasto público.
Reacciones
  
Para el economista Elmer Cuba, las observaciones del Consejo  Fiscal son impertinentes porque el Perú es muy solvente en el terreno fiscal.
  
El economista sostiene que por ello, los inversionistas ven  al país en mejor situación que sus pares, e incluso que Chile.
A decir de Cuba, los restos fiscales del país no están en el  nivel de su deuda pública o en el aumento del déficit fiscal, sino en aquellos  problemas que involucran a la población y a las empresas, como la baja presión  tributaria, el elevado incumplimiento del IGV y el Impuesto a la Renta y en la  calidad del gasto público, así como en detectar corrupción que puede haber en  el gasto de los gobiernos subnacionales.
  
"Esos son los temas centrales de la policía fiscal del  país y el Consejo Fiscal ha decidido no meterse en eso, sino en el gran  agregado. Los temas cruciales no están ahí", comenta. 
  
De acuerdo con Cuba, el nivel de deuda pública como  porcentaje del PBI es el más bajo de América Latina y de los países emergentes,  por ello el riesgo país se ha reducido.
  
Por su parte, Luis Fernando Alegría, economista principal  del Instituto Peruano de Economía (IEP), afirma a Día 1 que las agencias calificadoras  de riesgo no han cuestionado el decreto de Urgencia del Ejecutivo, con lo cual,  la decisión tomada por el gobierno central no sería una acción que atente  contra la credibilidad de Gobierno y la solidez fiscal.
  
Sin embargo, sostiene que detrás de la trayectoria de las  cuentas fiscales hay un problema estructural, debido a que en los dos últimos  cinco años ha relajado las reglas.
  
"Para que pase dos veces en cinco años (el aplazamiento  de la convergencia del déficit fiscal) te está diciendo que algo de fondo está  fallando", menciona.
  De acuerdo con el economista, en los dos últimos años, los  ingresos fiscales se han desacelerado, han pasado de crecer alrededor de 14% en  el 2018 a alrededor de 6% en el 2019.
Publicado en Gestión, 27 de enero del 2020.