VIDA DESPUÉS DE SER JEFE

 

Hasta a la carrera profesional más reluciente le llega el día del fin.

Elegir el momento adecuado para jubilarse ya es complicado, pero muchos también tienen dificultades para imaginar que harán después. En su nuevo libro, "Changing Gear" (2021), Jan Hall, excazatalentos y Jon Stokes, sicólogo, discuten las estrategias que las personas pueden seguir cuando se acercan a la "tercera etapa" de la vida, que viene luego de la infancia y la carrera.

Los autores apuntan que en la tercera etapa los individuos redefinen su rol en la comunidad. Este proceso podría ser particularmente difícil para quienes han desempeñado cargos elevados.

Es que deben aceptar la pérdida de estatus y enfrentar la realidad de que son reemplazables y mortales. El empleo proporciona más que un ingreso: otorga una estructura al día, crea nuevas amistades y provee un propósito pues la gente forma parte de un esfuerzo compartido.

Quienes han alcanzado lo más alto del árbol suelen descuidar las otras áreas de sus vidas de hecho, no habrían llegado tan alto si no lo hubiesen hecho. Para esas personas, jubilarse mucho a las cinco etapas del duelo: negación, ira, negociación, depresión y aceptación. La negación es particularmente significativa.

Hall y Stokes observan que, "quienes tienen poder gradualmente se aíslan de la realidad" y "desarrollan una sensación inflada de su propia importancia", Los ejecutivos podrían no darse cuenta que están desconectados de las novedades del mercado o que su comportamiento arrogante los está alejando de su personal. Cuando otros les sugieren que es tiempo de dar un paso al costado, podrían sentirse furiosos ante esa aparente traición.

También puede ser difícil para los altos cargos mapear un futuro tras dejar sus empleos. Mientras continúan trabajando, quizás no tengan tiempo para considerar actividades alternativas. Jubilarse podría ser un poco como para un drogadicto interrumpir bruscamente el consumo de sustancias. La palabra "jubilación" conjura ideas de pasividad y repliegue que muchos encuentran poco atractivo, puntualizan los autores.

Hay individuos que eligen roles de liderazgo porque les gusta tener poder sobre otros o ejercer control sobre eventos. Cambiar a un rol no ejecutivo o hacer trabajo voluntario benéfico no sería un sustituto adecuado pues querrán estar a cargo de algo. La vida hogareña tampoco será necesariamente fácil. Cónyuges e hijos suelen acostumbrarse a arreglárselas sin un progenitor que trabaja largas horas.

Han construido sus propias redes de amigos y actividades, y podrían encontrar complicado adaptarse a la presencia de un aburrido pensionista rondando por la casa. Como si eso fuera poco, podría ser difícil para quienes ostentan posiciones de autoridad desarrollar amistades estrechas, particularmente en el trabajo.

El libro presenta una serie de estudios de casos de gente que ha atravesado este tiempo de conmoción, de algunos con mucho mayor suceso que otros. Quizás inevitablemente, hay algo de jerga sicológica, pero los lectores que toleran términos como "mentalidad de transición" o "aptitudes potenciales deseadas", descubrirán que las historias individuales son instructivas y las preguntas planteadas por los autores son importantes.

Las personas que están cerca de la jubilación deben determinar quiénes han sido, quiénes son ahora y en quiénes les gustaría convertirse. No obstante, las respuestas variarán de individuo a individuo pues no hay una solución que sirva para todos. El padre de este columnista nunca se sintió más feliz que cuando, tras jubilarse como director de colegio, pudo pasar su tiempo leyendo, practicando jardinería y escuchando a Mozart.

Otros se sentirían aburridos hasta el llanto con una vida así. Los autores recomiendan que la gente esté dispuesta a experimentar, que intente realizar nuevas actividades, desarrolle nuevas aptitudes y converse con otros que han atravesado por el mismo proceso.

Otro planteamiento es manejar un diario y hacer una lista de cosas que a uno le agrada hacer, o que haya deseado realizar.

Asimismo, quienes se acercan a la jubilación debieran considerar el tipo de rol que les gusta desempeñar. ¿Disfrutan trabajando con otros o trabajando solos? ¿Qué les causa mayor satisfacción, desarrollar ideas o coordinar equipos?

Dado que la autoconciencia es una aptitud difícil de obtener, las personas debieran conversar con unos pocos contactos en quienes confían a fin de descubrir cómo son percibidas por el resto de su entorno. Podrían descubrir que las respuestas son sorprendentes.

Este es un asunto crítico.

Pensemos en todo el tiempo que los jóvenes dedican a decidir en qué universidad les gustaría estudiar, qué especialidad les gustaría escoger y qué carrera les gustarpia seguir. Decidir el estilo de vida tras la carrera profesional es igual de importante, pues se podrían tener por delante décadas para disfrutar.

 

 

Publicado en Gestión, 22 de abril del 2021.